El Staffy (Staffordshire Bull Terrier) es un perro muy valiente y tenaz. Suele ser muy amigable con las personas y particularmente con los niños, pero puede ser agresivo con perros y otros animales. De entre todas las razas de perros, esta es la única en cuyo estándar se indica que debe ser "completamente confiable". Por supuesto, eso no significa que todos los Staffies son completamente confiables, sino que eso es a lo que apunta el ideal de la raza.

Estos perros son fáciles de entrenar cuando se emplean métodos positivos de adiestramiento canino. Responden moderadamente bien a los métodos tradicionales, pero es preferible emplear métodos que no confronten al perro con el entrenador. Por otro lado, se dice que la educación de los perros para no ensuciar la casa puede tomar más tiempo con esta raza que con otras.

La raza suele ser sociable con las personas y tiende a ser una de las mejores mascotas que existen para acompañar a los niños. Sin embargo, por su nivel de energía, su fortaleza y sus instintos combativos, no es la mejor opción para propietarios novatos. Es una raza más recomendable para familias que tienen experiencia previa con perros.

Puede llevarse regularmente bien con otros perros y animales si es que se lo educa desde cachorro. Sin embargo, un Staffordshire bull terrier que no ha sido correctamente socializado desde su infancia puede ser un perro muy agresivo hacia sus congéneres y hacia otras mascotas.

La socialización de estos perros, tanto con personas, con otros perros y con otros animales, es muy importante.